Me di cuenta que realmente me quisiste cuando al irme de tu lado me buscaste y trataste de olvidarme de esa manera tan tuya.
Que enfermiza era esa inseguridad mutua,
es por eso que ahora pienso que si algo parte mal así se queda,
por eso te di la espalda cuando me necesitabas,
para bien o para mal era preciso que así lo hiciera.
Ahora que me siento solo ganas me sobran,
pero mi orgullo también está en juego
y la misma piedra no debe cruzarte dos veces a menos que el destino así lo quisiera.
Sentimientos de por medio coexisten junto a recuerdos,
más sí es cierto que el tiempo te hace olvidar estas mierdas.